Nueva Casa de Acogida ya recibe a sus primeros usuarios
Desde la primera quincena de enero, el nuevo recinto comenzó a alojar a los primeros ocho beneficiarios como parte de la marcha blanca del proyecto.
La también llamada Casa Bethel, “Dios con nosotros” o “Casa de Dios”, terminó su obras a fines del año pasado, habilitando todas sus dependencias para recibir a los usuarios y acompañantes de toda la región y otras localidades del sur de Chile. Actualmente el recinto ya hizo el traslado de algunos enseres de la ex casa, proceso corto y amigable pues el proyecto incluyó nueva ropa de cama, sábanas y cobertores, útiles de aseo, juego de loza, utensilios de cocina, entre otros, lo que significó además vender algunos electrodomésticos que ya tenía el voluntariado de la Iglesia Bautista.
El proceso de traslado de las antiguas dependencias a la nueva infraestructura ha sido catalogado como “muy emocionante”, por la voluntaria líder de la Iglesia Bautista, Edith Gómez. “Nos costó un poquito el tomar la decisión de desconectarnos de la otra casa, eso nos ha pasado como voluntarias. Ahora las hermanas están fascinadas con el traslado para acá”.
La voluntaria también valoró la ampliación del público objetivo de esta iniciativa que, gracias a la habilitación de más y mejores espacios, incorpora tanto a hombres como mujeres como beneficiados. “Los varones están contentos, porque ahora sí que tienen donde venir. Me llamó un caballero de Porvenir, que quiere cupo para mañana porque viene a exámenes, entonces ahora está feliz porque tiene donde llegar. El problema – anteriormente – eran los varones, decían ‘no tengo dónde estar’, así que esta casa ha sido una tremenda bendición. Y no ha sido para nada complicado tratar con varones, porque les entregamos sus sábanas, les designamos su pieza, y les decimos lo que tiene que hacer”.
Manuel Alvarado Paredes, de 68 años de edad y estanciero de toda la vida, llegó a Punta Arenas hace más de dos meses en un traslado de urgencia desde el Hospital de Puerto Natales, situación que lo mantuvo internado en el Hospital Clínico Magallanes hasta la semana pasada para pasar ahora a un tratamiento de diálisis día por medio que involucra permanecer en la capital regional hasta ingresar a un cupo – ya gestionado junto a la familia – en el establecimiento de origen.
“Cuando entré acá adentro, me vinieron a dejar dos mujeres, y vi que la casa era muy hermosa. Me mostraron la cocina, muy bonita la encontré, y ahí me llevaron por los baños, por las camas, todo muy bonito”, fue la primera impresión de don Manuel al conocer la Casa de Acogida el pasado viernes. También destacó la atención de los funcionarios del hospital, que lo han hecho sentir como en casa al no tener familiares en Punta Arenas.
El tratamiento de diálisis involucra asistir por más de 4 horas al primer turno de los días martes, jueves y sábados del principal recinto de salud de Magallanes. Posterior a ello, el hospital ha dispuesto entregarle el servicio de almuerzo, para luego descansar a pasos de allí en la Casa de Acogida. “Estoy bien, estoy tranquilo. Voy a hacer mi tratamiento y me vengo, me tomo un tecito. Voy a comer al hospital, porque el hospital me da la comida, ese es el arreglo que hicimos con el doctor que me atendía y él hizo todos los papeleos para que yo me cambie acá”. Don Manuel aprovecha su tiempo además para ordenar sus enseres, lavar su ropa y ver televisión junto al resto de los pacientes y el voluntariado.
Al respecto la Dra. María Cristina Díaz recordó que esta inversión del Ministerio de Salud en convenio con el Gobierno Regional de Magallanes, alcanzó los 712 millones de pesos en obras civiles, además de 50 millones en equipos y equipamiento, y fue desarrollada dentro de los plazos esperados. “Esta importante iniciativa viene a entregar equidad y mejor acceso a la salud pública a nuestros pacientes de toda la región, vale decir de las cuatro provincias de Magallanes, Tierra del Fuego, Última Esperanza y Antártica, además de beneficiarios de nuestra Macro Zona Sur de los Servicios de Salud que requieren de la reconocida resolutividad del Hospital Clínico”.
La nueva Casa de Acogida, ubicada al costado del Centro de Rehabilitación del Club de leones y del Hospital Clínico Magallanes, consta de una capacidad de 28 camas, áreas comunes de living, comedor, cocina, además de una cómoda vivienda independiente para una voluntaria de la iglesia.

