Se decreta cuarentena política en todo el país – Víctor Maldonado – Opiniones
No se puede tener diferentes diagnósticos de país según convenga, y sacar consecuencias contradictorias según dicten los intereses.
Cuando se habla de la crisis sanitaria, el gobierno nos llama a recuperar la normalidad a marchas forzadas. Identifica el punto máximo de la pandemia en las semanas que siguen, lo que permite reanudar actividades económicas, administrativas y educacionales. Esto lo presenta como una demostración de lo bien que se están haciendo las cosas.
Cuando se trata del itinerario constitucional todo parece cambiar. Por lo que se escucha de fuentes oficialistas, “es anda tú a saber cuánto durará la crisis”. Esta incerteza es -se nos dice- lo que llega a prever la postergación del plebiscito. El efecto de la recesión económica puede ser devastador, nos señala Piñera.
Hay que ser previsores, se pontifica. Hay que postergar el momento en que se va a las urnas, el plebiscito queda para más adelante. Incluso, algunos han planteado, ya que estamos de modificación en modificación, cambiar la elección de gobernadores regionales, juntándola con la elección de presidencial.
Esta ultima propuesta es un conejo tamaño familiar sacado de un sombrero capaz de cubrir cualquier cosa. ¿De modo que en qué quedamos? ¿vamos hacia la recuperación de la normalidad o nos estamos alejando de ella?
Si no fuera completamente ridículo, lo que se nos está diciendo es que la crisis sanitaria logra contenerse, la actividad económica tiene autorización para reactivarse y se amplia la cuarentena política al conjunto del país. Y todo esto debido a la misma causa.
Pero no hay virus que dé para tanto ni que provoque tantos efectos, todos -casualmente- en beneficio de la derecha. Hay que tener una cosa clara: si el plebiscito se mueve, el plebiscito se cae. Porque no hay donde cobijarlo, dado el calendario que tenemos.
El próximo año, tenemos dos tandas, cada una de las cuales comprende cuatro elecciones: el 11 de abril están programadas los comicios para alcaldes, concejales, gobernadores regionales y constituyentes. Sus preparativos comienzan en enero y se terminan justo para pasa a la siguiente ronda.
El 21 de noviembre, se tienen las elecciones de presidente, senadores, diputados y cores. Por si fuera poco, la segunda vuelta presidencia el 19 de diciembre. ¿Díganme donde cabe un plebiscito? En ninguna parte, porque este cronograma supone ese tema despejado.
Las elecciones presidenciales y parlamentarias no se han movido nunca, y ya hemos movido un plebiscito que se debió ya haber realizado, según se pensó originalmente. Lo que ha ocurrido es que el itinerario institucional se comprimió y no hay casi margen de maniobra.
Si no hay plebiscito, no hay un momento en que la oposición pueda confluir, tras hacerse manifiesta la existencia de una mayoría en pro de los cambios en una democracia en expansión. Se llega a la presidencial desordenados, desunidos frente a una derecha que perdió todos los preliminares pero gano la final. Sugiero no suicidarse.
Víctor Maldonado R.
Posible postergación del Plebiscito
Heraldo Muñoz que es «sumamente grave» el plantear hoy una posible postergación del plebiscito constitucional del 25 de octubre.
Heraldo Muñoz, presidente PPD
Veo «con enorme preocupación (que) algunas autoridades del más alto nivel, como son el ministro del Interior y, más aún, el Presidente de la República esgrimiendo argumentos para la eventual postergación como las razones sanitarias».
«Acá hay una incoherencia total, porque se nos llama a un retorno paulatino a la actividad económica, a una ‘nueva normalidad’ en las próximas semanas y, sin embargo, se empieza a cuestionar la eventualidad de realizar el plebiscito por razones sanitarias, pero no sólo por razones sanitarias».
«Lo más grave, lo más serio, es que el Presidente de la República dice ‘bueno, vamos a estar en recesión económica, entonces habría que quizás repensar la realización del plebiscito. Eso es muy serio, porque las democracias sanas, las democracias sólidas, realizan elecciones en circunstancias aún difíciles y no las postergan».
El plantear una posible postergación «es sumamente grave, porque aquí hubo un acuerdo y los acuerdos constitucionales para un plebiscito para una nueva Constitución tienen que ser respetados».
«No empecemos a anticipar algo que tiene un trasfondo político que es, a mi juicio, perjudicial, porque no ayuda a la unidad que debemos tener en estos momentos» en el combate ante el Covid-19.
La prioridad hoy es «darle tranquilidad al país para sentarnos a colaborar con el control del coronavirus. La prioridad número uno del país es y debiera ser cómo controlar la pandemia y cómo minimizar el impacto económico y social del coronavirus en la clase media y en los más vulnerables».
Nueva reforma tributaria
Ffrench-Davis afirma que, tras recuperación luego de la crisis económica necesitamos una nueva reforma tributaria.
Ricardo Ffrench-Davis economista (DC)
«Necesitamos una reforma tributaria de 3, 4, 5 puntos del PIB, más allá de la reforma tributaria que acabamos de tener, que era abrumadoramente mejor que el proyecto original del Gobierno, que era impresionantemente regresivo, incomprensible».
Con el fin de evitar que se repita el estallido social de octubre, «hay que hacer cambios estructurales, calidad de la educación, mejoras en la salud, formación de un sistema nacional de salud, mejorar la capacitación laboral y echar a andar una reforma tributaria, gradual, a tres, cuatro, cinco o 10 años».
«El problema es que no está en el ADN de este gobierno utilizar con fortaleza las disponibilidades que tiene el Estado para hacer cosas y la preocupación de economizar platas, cuando se trata de platas para la mayoría de la gente».
«La situación actual es muy grave, la situación del 82 fue gravísima, fue tan intensa que tuvimos un 31 por ciento de la fuerza de trabajo desocupada (…) el ingreso per cápita de Chile recién siete años después se volvió al nivel que se tenía el año 81 y eso sería horroroso volverlo a repetir».


