Educadoras de JUNJI Magallanes trabajan para fomentar la lectura en familia
Decenas de funcionarias institucionales, que trabajan en jardines infantiles de toda la región, fueron capacitadas por profesionales de la organización, del Ministerio de Educación, el Consejo de la Cultura y las Artes y la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos.
Por tres días educadoras y técnicos de la Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI) Magallanes y Antártica Chilena, que trabajan en distintos establecimientos de toda la región, participaron de una entretenida, alegre y fructífera capacitación de acuerdo al Plan Nacional de Lectura, que apoyan el Ministerio de Educación, la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos, el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes y la propia institución.
De acuerdo a Valeria Saavedra Medina, coordinadora regional en JUNJI del plan, “este proceso de perfeccionamiento se hace cada año pero siempre cuenta con nuevas estrategias. Cada temporada el equipo regional viaja al nivel central a hacerse con los contenidos que deberán ser entregados en las regiones. Este 2016 hemos querido fomentar la lectura en familia con los párvulos, de modo que los progresos que haya en el aula con niñas y niños no se pierdan gracias a la acción en el hogar”. La profesional agregó que durante los tres días fue elaborado un plan de trabajo local, el que será evaluado desde los jardines de acuerdo a una pauta de seguimiento.
El trabajo contó con la presencia de Mónica Bombal Molina, coordinadora del Plan Nacional de Lectura del Ministerio de Educación, que evaluó que “Magallanes está trabajando muy bien la mesa técnica regional que también conforma Fundación Integra, estableciendo un plan regional y efectuando un diagnóstico con la Universidad de Magallanes y muchas otras instituciones públicas. Me marcho contenta con lo que observé. Me alegra ver que en JUNJI hay un trabajo sistematizado con los libros integrados a los programas de trabajo”.
Porfiria Barrientos, encargada del Programa Comunicacional JUNJI en la Provincia de Última Esperanza, destacó el retomar contenidos. “Con el paso de los años las educadoras perdemos ciertas estrategias o caemos en errores. Yo no había participado en una instancia como ésta, siguiendo lineamientos nacionales con los tiempos ordenados. Fue una capacitación muy participativa con elaboración de materiales. Hicimos un susurrador y un paraguas ‘pequeños universos portátiles (PUP)’ para leer a niñas y niños”. La educadora prevé que lo aprendido es perfectamente aplicable con las decenas de familias con las que trabaja, más aún cuando la mayoría de ellas son socias en la biblioteca de Puerto Natales.
“Abordamos temáticas pertinentes a la labor educativa. En especial para mí tenía relevancia el fomento lector en el primer ciclo, la sala cuna. ¿Cómo hacer llegar la literatura a los niños más pequeños? Estoy agradecida del material bibliográfico y técnico que se nos hizo llegar”, dijo la educadora del Jardín Infantil “Continente Blanco” de Punta Arenas, Ana Luisa Morales.
