La Agrupación Hijos y Nietos por la Memoria y el Taller de Cueca Sola Punta Arenas conmemoran Día de los Derechos Humanos

Con actividades artísticas programadas para este sábado 10 de diciembre
Con el propósito de conmemorar el Día de los Derechos Humanos declarado a nivel mundial en el año 1950 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, la agrupación Hijos y Nietos por la Memoria y el Taller de Cueca Sola Punta Arenas han programado dos actividades artísticas que se enfocan en la memoria histórica.
La primera de ellas está a cargo del Taller Cueca Sola Punta Arenas y se llevará a cabo a las 16.00 horas en el Cementerio Municipal de nuestra ciudad y consiste en una presentación del grupo, con la ejecución de tres pies de cueca en un claro homenaje a las y los desaparecidos de la dictadura cívico militar y sus familiares, quienes aún siguen esperando por verdad, justicia y reparación.
A partir de las 20.00 horas en la Costanera del Estrecho, entre Croacia y Mejicana (a pasos del puente) la agrupación Hijos y Nietos por la Memoria realizará la instalación artística “Ya es tiempo”, que propone a las y los participantes sentarse a orillas del Estrecho de Magallanes a contemplar el mar. En tanto que los organizadores han señalado en su convocatoria: “Lo haremos como hijos e hijas de la historia, bajo la premisa de un presente que solamente es posible en el conocimiento del pasado que nos ha definido como nación. Desde esa perspectiva y en completa armonía con el hoy, la acción busca provocar una pausa para la reflexión y el encuentro”.
En ambas actividades, se contará con la presencia de Marcela Meza Lagos, quien se encuentra de paso en Punta Arenas como parte de la realización del documental “Hasta encontrarte”, del director Luis Díaz Bahamondes, que sigue los pasos de su madre, Gloria Esther Lagos Nilsson, detenida y desaparecida a manos de los agentes de la dictadura cívico militar que inició el 11 de septiembre de 1973 en Chile.
En el testimonio del portal Memoria Viva, Marcela Meza Lagos recuerda así a su madre: “Mi madre, Gloria Esther Lagos Nilsson, nacida en Porvenir el 29 de septiembre de 1945, tenía 28 años, llena de vida, hermosa, madre de tres hijos: Héctor, el mayor, de diez años; yo, Marcela, con ocho, Patricio, el más chico, de seis, y otro que venía en camino; contaba con casi tres meses de gestación; teníamos tanto par delante, pero el 26 de agosto de 1974 cambió el curso de vida para todos. Entrando la tarde, mamá llega muy agitada, dice que tiene que volver a salir, pero que al día siguiente estaríamos todos juntos, sin embargo tocan la puerta, preguntan por ella, luego me entero que eran del Servicio de Inteligencia Militar. Nos dicen que no nos preocupemos, que le harán unas preguntas y que al día siguiente en la mañana estaría de regreso en casa”. Desde ese día, Marcela, como tantos y tantas chilenas sigue en una búsqueda incansable de su mamá.