Club Agility Magallanes culminó Taller de capacitación de dueños de canes adoptados


Iniciativa fue posible gracias al apoyo de la Agrupación VIDA, el Equipo de Canes Adiestrados de Gendarmería, ANEF Magallanes y la Municipalidad de Punta Arenas.
El Club Agility Magallanes finalizó el sábado 25 su “Primer Taller de Obediencia Básica”, dirigido a personas y a sus canes adoptados en el primer semestre desde el Centro de Rescate Canino de Punta Arenas, con el objetivo de incentivar la adopción de mascotas de este recinto y difundir las buenas prácticas de tenencia responsable a través del adiestramiento.
Esta actividad impulsada por el Club Agility Magallanes fue completamente gratuita y su ceremonia de finalización se realizó en el gimnasio de la ANEF. Con una duración de 12 horas cronológicas, se realizó durante todos los sábados desde el 02 de junio y contó con un examen final práctico y posterior graduación de los participantes.
El curso contempló, entre otros elementos: Clase Teórica de Obediencia Básica, Inicio a la Propiocepción de mascotas, Ejercicios de adiestramiento en Obediencia Básica y Ejercicios de Introducción al Agility, modalidad competitiva donde un guía dirige a un perro sobre una serie de obstáculos.
Esta iniciativa es pionera en la región y fue posible gracias al compromiso de los integrantes del Club Agility Magallanes y el apoyo de la Agrupación VIDA, quienes colaboraron en conjunto con la inscripción y difusión de la actividad. En calidad de voluntarios, también colaboraron en este proyecto adiestradores del Equipo de Canes Adiestrados de Gendarmería de Chile, quienes estuvieron a cargo del inicio del programa de entrenamiento. Asimismo, la ANEF apoyó con las instalaciones para la realización del taller y, de manera muy importante, la Municipalidad de Punta Arenas brindó el aporte logístico necesario para llevarlo a ejecución.
Las clases estuvieron a cargo del Director del Club Agility Magallanes, Rony Trabol, instructor y adiestrador profesional quien destacó la participación interinstitucional y suma de esfuerzos en aras de un fundamental objetivo como lo es la “tenencia responsable de Mascotas”. A la luz de ello, destacó la calidad de los participantes y beneficiarios del proyecto como el caso de Nelly Díaz quien, a sus 68 años, participó de manera constante con su perro “Manjar” y pudo demostrar que no hay límites en lo que uno se propone, y menos en el adiestramiento.
“Estamos muy contentos de contribuir con un granito de arena a la Tenencia Responsable de Mascotas con métodos que no son aversivos, no utilizamos collares de ahorques, de púas, no forzamos al perro. El aprendizaje es sólo con motivación de juego, cariño y premios de comida. La repetición, la constancia y manejar la frustración son cualidades que van desarrollando las personas en este curso, que al final se terminan por dar cuenta que no fue el perro quien cambió, cambió la manera de vincularse con él”, agregó Trabol.
El taller contó con un cupo limitado de 15 participantes.