Promesa de abastecimiento contínuo de gas argentino nuevamente no se cumplió: Profesionales de Enap Magallanes ya habían advertido consecuencias de dicho acuerdo

Malas noticias para Chile ha significado la baja en el precio del barril de crudo donde unos de sus efectos ha sido la inviabilidad para la producción e importación de gas argentino (como derivado del petróleo) desde el yacimiento Vaca Muerta, en la provincia de Neuquén Argentina.

Lo anterior ha generado gran inquietud principalmente en la zona sur de Chile, sumado al alza de la energía eléctrica principalmente al sector industrial de la zona del BioBio. La dependencia del recurso energético desde el vecino país, nuevamente pone en entredicho el cuestionado acuerdo comercial de importación, concretado en 2018 por los presidentes de ambas naciones.

Recordemos que en 2018 la ministra de Energía de la época, Susana Jiménez, anunciaba con bombos y platillos nuevas negociaciones con su par argentino. En julio de ese año la máxima autoridad de la cartera, se refería al importante avance que significaría para Chile la “integración energética con Argentina” lo que según sus palabras, significaría “reportar importantes beneficios mutuos, como por ejemplo, en el largo plazo darle más seguridad y flexibilidad a nuestro sistema”, explicaba.
Ante eso, el presidente del Sindicato de Profesionales de Enap, Guido Kusanovic Glusevic, ya alertaba sobre los riesgos de dejar a criterio del país vecino el abastecimiento energético para el sur de nuestro país. “En más de una oportunidad, por las más diversas razones, la compra de gas argentino ha derivado en serias dificultades para nuestro país, lo que incuso llegó a afectar los planes exploratorios tras el cierre reiterado de la llave desde Argentina”.
A la incierta disponibilidad de gas argentino, hoy se suma un nuevo factor: Inactividad del yacimiento como consecuencia de los bajos los precios internacionales.
Kusanovic, va más allá y hoy nuevamente intenta abrir los ojos a los responsables de tomar las determinaciones estratégicas en pro de asegurar a mediano y largo plazo la viabilidad energética. “Siempre hemos apuntado a desarrollar nuevos negocios y nuevos clientes. Un ejemplo de ello, está precisamente en nuestro territorio nacional y particularmente en Magallanes. Además de asegurar el suministro continuo de gas natural, sin duda podríamos contribuir a descontaminar la zona sur de Chile. Esto es una decisión estratégica, de país, de política de Estado, donde los recursos claramente además de resolver un tema energético, privilegian con sus buenas decisiones a sus habitantes, abre un importante polo de trabajo y mano de obra local. Muy distinto a lo que estamos nuevamente viendo hoy. En resumen: la promesa de un abastecimiento continuo no se cumplió y además vemos nuevamente cómo por necesidades propias de Argentina, cierran la llave de suministro de gas hacia Chile”, concluyó.