El protagonismo en la calle y en la gente – Víctor Maldonado – Opinión

: “El protagonismo en la calle y en la gente”.
Hay dos cosas ciertas: no toda propuesta que viene de la oposición es unitaria y, aun así, no por ser una iniciativa parcial carece de mérito. Siempre se debe realizar un juicio fundado y actuar en consecuencia.
Acusar a un ministro es siempre un tema debatible, acusar a un exministro lo es todavía más y requiere evaluar tanto los méritos como la oportunidad.
Cuando la decisión se toma en la centroizquierda un par de aspectos importan: si permite la unidad de la oposición y si es compatible con la mantención del objetivo principal de este período, que es triunfar en el plebiscito. Ganaremos si predomina el optimismo que genera el saberse construyendo un país.
En otras oportunidades se ha criticada mucho que la oposición no actúe unida en casos que todos estiman como relevantes. En esta oportunidad la iniciativa se lanza sin haber logrado la participación de todos los actores. Por lo mismo, puede ser considerada una acción parcial que no compromete a la oposición, puesto que esta nunca se ha comprometido con un respaldo mayoritario.
La oposición cubre más espacio político en la misma medida que la pandemia pasa a estar controlada, dejando de ser el tema central y casi único que ocupa a la opinión pública. Si el plebiscito llega a ser un éxito es porque la pandemia deja de tener ese sitial casi obsesivo en nuestras preocupaciones. La pregunta es, pues, si este es el minuto para poner atención en Mañalich, un personaje del pasado, aunque sea un pasado reciente.
La pregunta es, también, quién deseamos que sea el protagonista de los próximos meses. Partimos de la base que, en un período de plebiscito, lo que queremos es que el ciudadano común y corriente se ponga al centro de la atención. Lugar que no se puede ser disputado por ningún miembro de la elite.
Una acusación constitucional pone el foco en un escenario que tiene pantalla todo el tiempo y que, sin embargo, no goza del prestigio y de la relevancia que merece. El Parlamento no es y no debe ser el actor que busca robar cámara.
Nadie va a considerar que este es un hito clave de nuestra historia si estamos instalando distractivos, dedicados a otra cosa y sin tener nada que ganar.
Hubiera sido distinto si tuviéramos la necesidad de sacar de la escena a un ministro responsable de una política errada, pero no es el caso. Eso ya se produjo. Con esta acción le daremos protagonismo y micrófono a quien menos lo merece, en la oportunidad menos indicada para que ello se produzca.
Se hace sentir una falta de congruencia en la expresión de las prioridades políticas que hay que sostener a semanas de producirse un triunfo del Apruebo, que constituye la prioridad uno, dos y tres.
El tema ahora es el destino del país, indirectamente eso nos permitirá identificar aquello que ya no puede mantenerse en su sitio. En esa categoría se encuentra la derecha en el poder y un sucesor de Piñera de su misma línea. Eso prima sobre la opinión que podamos tener sobre este ministro u otro y, mucho más, sobre un exministro u otro.
Esta acusación constitucional parece tener tres problemas: no es la oportunidad, no es el lugar, no es la prioridad. A parte de eso, podemos seguir discutiéndolo.
Víctor Maldonado R.
Acusación contra Mañalich
Diversas opiniones existen en la oposición con motivo de la acusación constitucional presentada en contra del ex ministro de Salud Jaime Mañalich.
Diputada Marcela Hernando (PR)
A Mañalich “le jugará en contra los testimonios de mucha gente que sufrió las consecuencias de sus decisiones, en directa relación, tanto de funcionarios de la salud como familiares de personas que fallecieron».
Diputado Ricardo Célis (PPD)
La acusación «no es contra el ministro Mañalich como persona; es por su rol dirigiendo una política de Gobierno que finalmente ha sido desastrosa».
«No sé cómo el exministro puede pensar que los resultados son buenos, si tenemos una de las mayores mortalidades del mundo cuando se corrige por millón de habitantes».
Daniel Verdessi, jefe bancada (DC)
Al adelanta que la acusación contra Mañalich congelaba el anunciado libelo contra el ministro del Interior, Víctor Pérez: «no podemos estar con varios temas de ese tipo y de esa importancia a la vez».
Diputado Juan Luis Castro (PS)
“Las acusaciones son un instrumento que se usan como último recurso».
«En este caso hay un problema de oportunidad. Yo no soy defensor de Mañalich, pero creo que tampoco en la oposición podemos estar haciendo disparos al voleo y andar haciendo acusaciones que no tengan un destino claro, preciso, y argumentación, y que fraccionen y dividan a la oposición».
Facilidades para los independientes
Los senadores Alejandro Guillier y Francisco Huenchumilla presentan una reforma Constitucional para facilitar que independientes puedan ser convencionales.
Senador Alejandro Guillier (Ind.)
“Junto a Francisco Huenchumilla hemos visto que se ha ido entendiendo, que un proceso constituyente que no asegure la debida participación de la ciudadanía será una traición al espíritu reformador de octubre. Por eso presentamos esta reforma, que dicho en simple, busca emparejar un poco la cancha para aquellas personas que no representan a un partido”.
Senador Francisco Huenchumilla (DC)
El acuerdo político del pasado 15 de noviembre de 2019 fue “un buen punto de partida, el puntapié inicial de este camino que nos ha llevado por fin a iniciar un proceso constituyente. Pero fue por supuesto insuficiente, abrió muchas interrogantes y dejó temas por resolver, y entre ellos este punto que es esencial”.
El proceso constituyente “debe tener elementos de inclusión que otorguen al proceso la legitimidad necesaria, o lo que es lo mismo, dejar la menor cantidad posible de cabos sueltos que después permitan a ciertos grupos cuestionarlo. Sólo así, la nueva Carta Magna que tengamos no será puesta en tela de juicio, como ocurre con la actual (…) asegurar y facilitar la participación de convencionales independientes, es integrar a otro grupo que no puede quedar excluido de este proceso, porque nadie puede quedar fuera”.
