No sumemos más barreras en discapacidad – Valeska Moraga Carrera, Abogada Convenio Corporación de Asistencia Judicial – SENADIS – Opinión

Seguramente alguna vez hemos escuchado la frase que el lenguaje genera realidades y, por lo mismo, cómo decimos, cómo expresamos, o simplemente cual o tal palabra utilizamos puede ser clave en el efecto que generamos ante otra persona. 

Lamentablemente y no pocas veces, la poderosa herramienta del lenguaje muchas veces puede ser utilizada de muy mala manera y termina generando expresiones llenas de prejuicios, discriminación, y exclusión

Por eso, todo cambio de paradigma debe incluir la forma de comunicar, más aún si nos referimos a grupos sociales que históricamente se han encontrado con múltiples barreras del entorno que no les permiten una participación plena en igualdad de condiciones. El lenguaje tiene que dejar de ser una de ellas, abandonar esas formas peyorativas que han perseguido a los grupos discriminados. 

Si entendemos esta importancia del lenguaje es que entenderemos el por qué hoy hablamos de “personas con discapacidad” y dejamos atrás conceptos utilizados anteriormente. Y para llegar a este punto ha sido camino largo, evolutivo, y al que hay que acostumbrarse para que la mirada sea en sujetos de pleno derecho, donde el foco es la persona y no las discapacidades.

Tenemos que seguir este camino, reeducar y no seguir hablando de “personas especiales”, “minusválidos”, o “con capacidades especiales”. Estos errores son evitables si creamos conciencia y nos centramos en que todos somos dotados de derecho por igual.

Dejemos de poner obstáculos, de crear barreras sociales, de utilizar el lenguaje para excluir. Entendamos que el lenguaje puede ser una primera herramienta para crear una nueva realidad. Una realidad inclusiva que permita que las personas con discapacidad participen plenamente en todo aspecto de la vida.