Mientras las principales economías buscan aun controlar la inflación, nosotros pensamos en reactivación | Alvaro Vargas R., SEREMI de Hacienda, región de Magallanes

La actividad en la Eurozona lleva cuatro meses de contracción económica.
De hecho, el comúnmente conocido como el motor de Europa, Alemania, preocupa debido a varios trimestres de decrecimiento. En específico, dicho país evitó una recesión técnica el segundo trimestre de este año, con una tasa de crecimiento de 0%, y con expectativas de mayor baja en la actividad durante este tercer trimestre. Por otra parte, la inflación sigue siendo preocupación en las principales economías mundiales, Reino Unido en mayo-junio de este año presentaba una inflación interanual cercana al 8% muy lejos de su rango meta del 2%, también la unión europea con una inflación interanual cercana al 7% o Estados unidos con un 4%, el doble de su rango meta.
Respecto a lo último, en general las expectativas a nivel mundial de inflación, según los reportes del FMI para el año 2023, eran cercanas al 7%. Aquello, implicó que la Reserva Federal de Estados Unidos y al Banco Central Europeo aplicó políticas monetarias restrictivas. Incluso, en el caso de la entidad europea la mayor subida del tipo de interés en dos décadas. Lo anterior no se conjugó adecuadamente con el galopante aumento del nivel de deuda pública y privada que venía arrastrándose desde antes de la pandemia y que, por supuesto, se acrecentó más en tal periodo.
Lo mencionado es fundamental para entender el momento económico en el que se encuentra nuestro país. A diferencia de la Eurozona y de la principal economía global, el Banco Central de Chile declara que la inflación está convergiendo al rango meta y ha comenzado una baja en la tasa de interés, que podría considerarse como el comienzo del ciclo de recuperación económica.
En una “pequeña economía abierta”, como se cataloga nuestra economía nacional, entender el peso de los ciclos económicos globales es clave para sopesar el desempeño macroeconómico que estamos teniendo en Chile. Por ejemplo, el gran manejo que tuvo nuestro país durante la crisis subprime es destacado dado el contexto de recesión global que se vivía, pero nadie lo compararía con las cifras que se tenían a principios de los 2000 en el llamado boom de los commodities.
Hoy en día nuestro país ha tenido aciertos económicos debido a una institucionalidad seria, el Banco Central se anticipó a las presiones inflacionarias y el Ministro Marcel, en la misma línea, llevó a cabo la segunda reducción presupuestaria más grande a nivel global. Esto último significó que el primer trimestre de este año la deuda pública tuviera su mayor descenso en una década, sumado a que el año 2022 se logró el primer superávit fiscal en 10 años. Lo anterior son indicadores de seriedad como país que, sin duda, entregan certidumbre a los mercados internacionales, pero también implicaron un freno a la economía en buscar enfriar los mercados y en apoyo a controlar la senda inflacionaria.
Para el año 2024 existe un consenso de un crecimiento de la producción de nuestro país cercano al 2%, en donde, particularmente esperamos que la recuperación se haga notar en Magallanes. La propuesta de ley de presupuesto presentada este viernes por el Presidente Gabriel Boric, tiene una de los mayores aumentos presupuestarios en inversión pública y en particular infraestructura pública estratégica para Magallanes. Además, la nueva política de zona extremas tiene un aumento considerable en la inversión local y los nuevos ingresos, tanto para el Gobierno Regional como para las municipalidades, a través de la Ley de Royalty Minero suman aún más inversión estratégica en nuestra región. Sin duda, aún quedan algunos meses de incertidumbre, potenciada con un escenario global inestable, pero es importante mencionar que los vaticinios de algunos sectores de un decrecimiento de 1,5% para este año no se cumplieron y, por el contrario, nuestras prospectivas han ido mejorando constantemente. Sobre todo, ante un manejo marcado por la responsabilidad fiscal y la disposición al diálogo.
Alvaro Vargas, SEREMI de Hacienda de la región de Magallanes.