Movimiento Docente Autónomo emite declaración al término del paro de los profesores

Hemos recibido la siguiente declaración del Movimiento Docente Autónomo:
«El Movimiento Docente Autónomo, a la luz de los resultados de la última consulta, se hace un deber señalar lo siguiente:
1.- El Origen de un Fracaso Para partir, dos temas fundamentales que es necesario tener en cuentapara el análisis de la situación que hoy enfrentamos. En primer lugar, cuando en el año 2018 se define el plan de negociación y movilización éste contenía una treintena de demandas. La asamblea nacional, tomando en cuenta la experiencia histórica de las negociaciones del magisterio, prudentemente las redujo a diez, pero, siendo coherente con nuestra experiencia, no debieron ser más de cinco. Un segundo punto clave a considerar en este proceso, es la extensión en el tiempo de esta negociación.
La orientación directiva de traspasar la negociación de un año para otro, sin medir las amenazas que los escenarios futuros tenían para el logro de nuestros objetivos, no obstante las argumentaciones que señalaban los graves riesgos que ello representaba, fue una decisión que impacto severamente en las posibilidades de éxito de nuestro movimiento. No quisiéramos pensar que estas dos consideraciones, evidentes y reales señales de alerta, fueron conscientemente omitidas por consideraciones subalternas de carácter político o personalistas, pero si, obviamente, sus consecuencias no fueron sopesadas en toda su gravedad y magnitud. Pero hay más.
Los resultados de la consulta nacional del día 22 de julio y los hechos y situaciones que lo rodearon, nos dejan una huella amarga y preocupante sobre el estado actual del movimiento, y sobre todo, por el estilo de conducción que afloró en esa delicada y compleja encrucijada, situación en la que directivas y bases son sacadas a la pizarra por las circunstancias.
De partida, un llamado de atención a los dirigentes que seguramente no pasó desapercibido para el gobierno: la participación inicial de 45.000 docentes se redujo de manera radical a 20.000 y fracción en esta última consulta.
Sobre estas inquietantes cifras sin embargo debemos decir que, en nuestra opinión, ellas responden más que a un tema de merma de la energía o del compromiso de los docentes, a otro que dice relación con actitudes, decisiones y comportamientos directivos, que instalaron nubes muy oscuras sobre ciertas prácticas sindicales.
En efecto, Inducir el voto, como se hizo, con preguntas que mezclaban aceptación o rechazo a la propuesta del Mineduc con las estrategias de movilización, lograron crear confusión, poniendo en jaque a los docentes; la aparición de señales evidentes de una indisimulada campaña para atemorizar al profesorado con represalias por los descuentos y recuperaciones; y más grave aún, diseminar señales que de no aprobar la paupérrima propuesta del Mineduc traería como consecuencia una carnicería de los movilizados; y como guinda de este viscoso pastel, muchísimos docentes leyeron en ciertas declaraciones directivas la entrega de información privilegiada del estado de la movilización a la opinión pública y por ende al gobierno.
Por lo tanto, afirmamos que la preocupación por esta bajísima participación no hay buscarla de ninguna manera en las bases, sino en la conducción que de ellas se hizo. Que nadie se equivoque, estos resultados no podrán jamás opacar o minimizar el espíritu mostrado por miles de docentes, su despliegue, su compromiso, su creatividad y combatividad.
2.- La democracia y el bien común
La construcción democrática en cualquier nivel de la sociedad se basa en la diversidad de ideas de sus participantes, donde el diálogo es la fuente que alimenta al conjunto en vista del logro de los objetivos planificados. En esas prácticas se han construido las principales victorias sociales y políticas del movimiento sindical chileno; cuando ellas se olvidan o se alteran, el camino se llena de piedras, y el fracaso y la derrota son una consecuencia inevitable y reiterada.
Digámoslo claramente: ningún mecanismo, por moderno y de moda que sea, suplanta al encuentro y el intercambio entre actores que se respeten y consideren; dichos mecanismos ni siquiera bastan para una información plena y eficaz, y mucho menos para la discusión y toma de decisiones de un organismo democrático.
No se puede manejar una institución desde las redes sociales; no cuadra con una conducción democrática. Por ese camino se terminan acallando las posturas que disienten; vienen los encapsulamientos, los atrincheramientos, el sectarismos y la exclusión; pueden no gustarnos o incluso molestarnos la disidencia, pero es fundamental entender que en el ejercicio dialógico pueden escucharse voces de alerta indispensables para ahorrarnos problemas y fracasos.
La verdadera democracia reconoce el aporte de cada uno de los participantes, desde Arica a Punta Arenas, y de todos los movimientos que coexisten en este gremio, sin excluir a nadie. De lo contrario el enemigo real, el que está siempre despierto y es muy hábil, el que no respeta los derechos de los docentes y quiere retrotraer los avances logrados, tratará siempre de trasladar el conflicto hacia el interior de nuestra organización, de destruir el dialogo político, gremial y pedagógico de nuestra organización.
Los éxitos se construyen poniendo en tensión toda nuestra fuerza colectiva. Y cuando esos triunfos no son posibles, cuando la derrota nos golpea, el dolor es menor porque es un dolor compartido. No es justo ni ético el planteamiento de “si gano es mi triunfo, si pierdo el fracaso es de otros”.
3.- “Jugamos como nunca, perdimos como siempre”
La fuerza creadora del Magisterio se manifestó en cada rincón de Chile como remontándonos a nuestros mejores tiempos universitarios, cargada de compromiso, alegría, música, colores y acciones creativas, cuyos resultados germinaron en la opinión pública, traduciéndose en el convencimiento de que el tema educacional va más allá de un gobierno, que es tarea de todos y todas, que es necesaria una política educacional estatal sólida y democrática.
La lucha del magisterio traspasó todas nuestras expectativas, y en razón de esto la opinión pública y los medios de comunicación, que en un comienzo nos ignoraron, debieron abrir sus mentes y espacios para reconocer la justicia de nuestras demandas, sumado a esto al tema coyuntural de la reforma curricular que le dio el plus que nuestro movimiento por la educación necesitaba.
En suma, cruzamos las fronteras del gremio para hacer partícipe a toda la ciudadanía. La constatación más clara y fehaciente de lo dicho, son los escuálidos números en las encuestas de la ministra al término del conflicto. Toda su soberbia, respaldada por el inmenso poder comunicacional que ostenta el régimen, no pudo con la energía, compromiso y convicción que este gremio hizo gala en las calles de Chile. Sin embargo, el movimiento terminó con sus dirigentes llamando públicamente al repliegue. Por qué si ellos perdieron nosotros no ganamos.
Por qué si le infligimos al gobierno y a su ministra más soberbia, a la que encabeza la cruzada contra los avances conquistados en la educación publica gracias a largas y grandes movilizaciones, la que representaba las posiciones más duras del gobierno, una tremenda derrota política y comunicacional, por qué no fuimos capaces de conseguir objetivos básicos que ellos si podían resolver.
Por qué terminamos como terminamos.
El gremio y los docentes de todo el país, y el país mismo, que pone en nosotros la custodia de su educación, exigen que nosotros le demos una explicación satisfactoria.
4.- Como el Ave Fénix Al finalizar estas reflexiones, que buscan por sobre todo respuestas no para ajustar ni pasar cuentas, sino para aprender y enseñar de estas encrucijadas que nos pone la vida. Somos maestros y como tales somos actores protagónicos de nuestra sociedad. Somos trabajadores y a la vez custodios del mayor tesoro que tiene nuestro pueblo y que algunos quieren arrebatarle: su educación. Por eso y en este escenario, debemos renacer con nuevas fuerzas y retomar las banderas históricas del magisterio que son la defensa irrestricta de la educación pública, la construcción de una sociedad más justa e igualitaria y la carrera docente, su perfeccionamiento para mejorar las condiciones laborales de los y las docentes. Es posible, urgente y necesario hacerlo.
MOVIMIENTO DOCENTE AUTÓNOMO Santiago, julio 24 de 2019.»
