El paso a paso de la inoculación social – Rodolfo Cárdenas – Opinión
Estas últimas semanas observamos como crece sin control el número de personas contagiadas, así como la cruda crisis sanitaria y una realidad socioeconómica en el país y Latinoamérica que golpea profundamente en nuestros territorios, con altos indicadores de pobreza, con una comunicación de riesgo poco efectiva, que coloca en muchas ocasiones en entredicho a las autoridades, donde sectores influyentes del país o más conocidos como poderes facticos nos llevan al despeñadero al no validar las medidas.
Es así como pasamos de la esperanza en un proceso de vacunación que avanza con energía ha una desesperanza ante el aumento de personas contagiadas, donde las medidas preventivas no son acatadas o son visiblemente contradictorias a las realidades locales, con mensajes o contenidos que no están persuadiendo a la población, desmotivando el cumplimiento y el autocuidado, así como observan la limitada posibilidad de apoyo o las barreras para acceder ella, destacando con más fuerza en nuestra cotidianidad la operación de la letra chica, más que la posibilidad del acceso a las prestaciones estatales.
Hoy, en los tiempos que corren, tanto en nuestro país como región se requiere trabajar su autoestima, la salud mental, valorar lo colaborativo y el cambio de integrantes en los ejes estructurales de nuestra organizaciones locales, y nuevas estrategias, ya vemos que la vacuna no es la panacea para enfrentar la pandemia, sino que se requiere dejar el individualismo asfixiante y trabajar sobre lo colectivo, donde co- construyamos una nueva realidad tanto en los municipios como en Magallanes en su conjunto, cambios transcendentales para definir a nuestros gobernantes, con liderazgo y capacidades, así como también seguir impulsando aquella hoja en blanco que esperamos redactar entre todos y todas, en que se consagren de forma real la protección de nuestros derechos fundamentales como los sociales, y que dejemos en el olvido el acceso por privilegio o pituto.
Este cambio de actitud nos llevará a caminar por un rumbo más certero y dialogante, recomponiendo las bases para que cada uno de los integrantes de nuestras comunidades avance paso a paso a un desarrollo integral, y tengamos un progreso real en esta crisis que nos coarta libertades y limita nuestra interacción, donde vestigios inquisidores como el toque de queda, el espionaje y matonaje es visto como la nueva normalidad, volvamos a pensar en lo humano, en lo esencial para superar las condiciones actuales en coherencia a lo que ven, sienten, y dicen los territorios.
RODOLFO CARDENAS ALVARADO
Trabajador Social Porvenireño.
