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«Tengo un sentimiento muy fuerte y profundo contra la impunidad» | Fernando Lanfranco tras fallo de la Corte Suprema que anula sentencia de Consejo de Guerra de 1974 en Magallanes

«Tengo un sentimiento muy fuerte y profundo contra la impunidad» | Fernando Lanfranco tras fallo de la Corte Suprema que anula sentencia de Consejo de Guerra de 1974 en Magallanes
Fernando Lanfranco, 1974. Dibujo a lápiz de Héctor Avilés.

La Segunda Sala Penal de la Corte Suprema en fallo reciente, anuló la sentencia dictada por un Consejo de Guerra contra la Juventud Comunista de Punta Arenas que, en septiembre de 1974,  había condenado a Fernando Lanfranco Leverton, músico e ingeniero, a una pena de cinco años de presidio menor en su grado máximo como autor de delitos contra la Seguridad Interior del Estado y lo absolvió de todos los cargos que se le imputaron tras acreditarse su completa inocencia.

En fallo unánime, la Segunda Sala del máximo tribunal –integrada por los ministros Manuel Antonio Valderrama, Jorge Dahm y María Carolina Catepillán, más los abogados integrantes Eduardo Morales y Leonor Etcheberry– declaró la nulidad del proceso impugnado y la completa inocencia del recurrente, cuya condena se basó en testimonios obtenidos bajo tortura.

Ovejero Noticias conversó con Fernando Lanfranco sobre este fallo, que tiene un carácter histórico:

«En primer lugar, valorar el fallo, como resultado de una solicitud de anulación de la sentencia en mi
contra del Consejo de Guerra rol 30-1974. El Consejo de Guerra fue en contra de 14
compañeros(as), todos, según mis datos, están con vida. La solicitud la llevó a cabo
el abogado Francisco Ugas, de la oficina de Nelson Caucoto.»

¿Cuál es el sentimiento que te produce esta resolución del máximo tribunal?
«Tengo un sentimiento muy fuerte y profundo contra la impunidad. Considero que los
avances en materia de DD.HH. son limitados, que se ha generado mucha violencia y
descontento a nivel social y político, producto que, transcurridos 50 años desde el
golpe de estado, el estado de Chile ha sido incapaz de terminar con la impunidad o
dar muestras serias de querer ponerle termino. Mientras escribo estas líneas me
llega la información de que se están juntando las firmas en el Congreso para
conformar una comisión que investigue el hallazgo de osamentas asociadas a
detenidos desaparecidos encontradas en la sede central de la U. de Chile. ¿Hasta
cuándo? ¿Qué tiene que suceder en nuestro país para cerrar estas heridas y avanzar?
El fallo de la CS viene también a relevar una situación de injusticia tremenda.

Los Consejos de guerra en los inicios de la dictadura fueron verdaderos montajes legales.
«El fallo deja en evidencia la ilegalidad con que se llevó a cabo todo el proceso del Consejo
de Guerra. Entre otras, que las pruebas fueron conseguidas mediante tortura y
firmas, a rostro vendado, de las declaraciones de los inculpados.

¿El fallo de la Corte Suprema lo percibes también como una reivindicación de la dignidad de quienes estuvieron detenidos en 1973, para los detenidos y sus familias?
«En lo personal creo que recupero un poco de mi dignidad al dejar en claro mi total y
absoluta inocencia en lo que se pretendió a mí y a mis compañeros hacer partícipe
de acciones que no cometí o que se inventaron.

En lo familiar, mis hijos y nietos podrán leer y escuchar la verdad ya no solo de su
padre y abuelo sino también de la justicia. Mi madre, ya fallecida, seguramente
podrá descansar en paz. Todo lo que sufrió y padeció junto a otros padres y familiares
de quienes fuimos injustamente condenados y padecimos prisión, tortura,
vejámenes, relegación, exilio, finalmente logró demostrar que su tenaz lucha valió la
pena.»