Hablemos de la tele ¿Bienvenida farándula? | José Luis Córdova | Opinión

Hablemos de la tele ¿Bienvenida farándula? | José Luis Córdova | Opinión

Con carácter despectivo, «farándula» se asocia al entorno de famosos o «celebridades» (del inglés celebrity) cuya vida privada es objeto de atención de los medios de comunicación por escándalos de naturaleza afectiva, sexual o financiera, hasta llegar a lo morboso y extravagante o friki (del inglés freak) para favorecer el encumbramiento mediático de personas anónimas por el simple hecho de aparecer en los medios de forma más o menos efímera. 

En nuestro país, periodistas destacados de mediados del siglo pasado como Orlando Cabrera Leiva, Osvaldo Muñoz Romero, Guillermo Zurita Borja, Lucho Fuenzalida y Enrique “El Buho” Hormazábal, pueden considerarse los genuinos precursores clásicos de la actual farándula.

Eran personajes de la bohemia habituales invitados a los estrenos de revistas en el Bim Bam Bum, el Humoresque, Picaresque, Burlesque y las Boites Goyescas, Nuria, Royal, Pollo Dorado, Tap Room o Zeppelin, también a los estrenos teatrales o conciertos y recitales entre otras actividades artísticas. En estos escenarios deslumbraron bellas vedettes nacionales y extranjeras, populares cómicos, cantantes, bailarinas y bailarines con la producción de Buddy Day, fotografías de Julio Bustamante, David Rodríguez Peña, Pancho Silvestre, Bibí de Vicenzi, Lucho Arnés y las coreografías del maestro español Pepe Mairena.

Les sucedió una pléyade de periodistas mujeres y egresados de estudios superiores como María Romero, María Pilar Larraín, María de la Luz Marmentini, Lidia Baltra, Gladys Pinto, María Inés Sáez, Ana Josefa Silva, Antonio Freire, Italo Pasalacqua, Cristián Farías, Francisco Villagrán, Marcelo Sandoval, Rigoberto Carvajal y Carlos Tejos que llegaron a ser críticos de cine, ballet, teatro y ópera.

El término Farándula viene (del provenzal farandouloo), del alemán fahrender, «vagabundo»2y la francesa troupe  -es decir- entorno al mundo de los actores y demás profesionales del teatro y otras artes escénicas , en definitiva,  «el oficio de los farsantes» (del término farsa, broma), dedicados hoy al mundo de la televisión, con carácter de entretenimiento, cómico o superfluo.

Todas estas acepciones corresponden al actual fenómeno que inunda la televisión chilena y hace recordar a revistas y programas radiales que en el pasado se dedicaron a esta misma actividad, otrora periodística, que ha devenido en un género menor en el campo de las comunicaciones.

¿Por qué ha ocurrido esto? Entre otras razones, por la competencia desleal por conquistar “mercado”, por vender “productos”, por inundar pantallas, páginas y horarios radiales con liviandad, superficialidad, inutilidad. Lo importante es el marketing, el rating, la popularidad fácil, el morbo y el sensacionalismo.

No de otra manera se puede interpretar el afán de revelar intimidades, descubrir situaciones contractuales reservadas, amistades, romances y festejos o salidas nocturnas de los llamados “rostros” de la televisión -entiéndase por ellos; animadores, locutores, chicos y chicas realitys, actores, actrices, modelos y -lamentablemente también- periodistas (entre ellos “noteros” y “movileros”).

El regreso del espacio “Primer plano” ahora con Julio César Rodríguez, acompañado de Patricia Maldonado, Pamela Jiles y la periodista Cecilia Gutiérrez parece ser la guinda de la torta en Chilevisión, que sigue a los programas “Only fama” en Mega con Francisca García Huidobro, Michael Roldán, Daniela Aránguiz, Mariela Sotomayor y Paula Escobar; “Hay que decirlo” en Canal 13 con Pamela Díaz e Ignacio Gutiérrez y el giro farandulero de “Podemos Hablar”, con Diana Bolocco en Chilevisión.

Curiosamente un par de canales de televisión abierta que apenas se asoman en el rating, mantienen el género con “Sígueme” en TV+ con Julia Vial, Sergio Marabolí, Kena Larraín y Daniela Campos; “Que te lo digo” (Sergio Rojas, Luis Sandoval, Antonella Ríos) y “Zona de estrellas” (Mario Velasco, Hugo Valencia, Manu González, Adriana Barrientos, Claudia Schmidt) en Zona Latina. Todo indica que la farándula volvió para quedarse.