Paciencia es la receta

Paciencia es la receta

El doctor puede ser tan premonitorio como el meteorólogo con el estado del tiempo.

La palabra paciente puede tener varios significados y cada uno de ellos tiene un sentido propio. Paciente es el que padece, paciente es el que soporta, paciente es el que espera, paciente es el paciencioso, paciente es el que tiene paciencia, paciente es el que aguanta y espera. Paciencia tiene algunos sinónimos como tolerancia, entereza, estoicismo, perseverancia, temple.

Hay pacientes tranquilos, pacientes impacientes, pacientes reclamones, pacientes que se abandonan a su suerte.

Unos acuden a la indignación, a la cólera o la desesperación.

Pero la mejor receta siempre es la paciencia, ese estado de animo que te prepara para resistir los embates de la vida, de la salud y para saber soportar que las cosas pueden ser peores.

Paciencia para soportar los berrinches de niño malcriado llamado Donald Trump lanzando aranceles a 160 países en el mundo. Paciencia para aguantar la avalancha de candidatos mal preparados, mal informados, mal ubicados, mal argumentados y hasta malintencionados.

Paciencia para soportar los resfríos del invierno y las gripes del otoño. Paciencia para reconocer que tu AFP te está robando y parece que no puedes hacer nada, salvo quejarte pacientemente.

Cuando el doctor nos dice «usted es un buen paciente», no sabemos si se refiere a que somos usuarios de un sistema de salud o si somos quienes aguantamos y resistimos a los incompetentes.

Si la funcionaria del hospital demora tu trámite porque faltó «el papelito», para completar tu atención de salud, tienes que ser muy pero muy paciente, pero cuando te agrega que «la demora es por culpa del gobierno y si no le gusta se puede ir al privado», podría ocurrir que se te termine la paciencia y mandes todo a la mierda.

En los tiempos de la impaciencia, la receta es ser pacientes.

Se los digo por experiencia propia.

Manuel Luis Rodríguez U.