Contexto histórico y orígenes de la controversia entre Chile y Bolivia por el rio Silala

La guerra del Pacífico enfrentó a Chile con Bolivia en 1879, ocupando el ejército chileno todo el territorio del entonces Departamento del Litoral, un territorio rico en recursos minerales en el que se ubicaban diversas inversiones mineras, principalmente chilenas y británicas. Una vez concluida la guerra, Chile mantuvo dominio del territorio y lo incorporó rápidamente a su territorio nacional, dando origen a la antigua provincia de Antofagasta.
La existencia de un río que nacía en territorio boliviano tras la línea de tregua (que dio origen luego a la frontera internacional) para llegar al río San Pedro fue descrita por primera vez por el ingeniero neozelandés Josiah Holding en 1884, cuando trabajaba en el diseño y construcción de la línea férrea entre Antofagasta y Ollagüe.
Tras años de negociación, la frontera entre Chile y Bolivia fue establecida en el Tratado de Paz y Amistad 1904, siguiendo principalmente la línea que une las principales cimas de la cordillera de los Andes. En dicho tratado, se indica que la frontera “irá por un contrafuerte al cerrito de Silala ([hito] 16), y después en línea recta al cerro de Inacalari o del Cajón ([hito] 17)”. De acuerdo al gobierno chileno, el mapa con la demarcación de la frontera ya incluía el curso actual del Silala, lo que indicaría su reconocimiento con un río de carácter internacional.56
El 31 de julio de 1906, Chile otorgó una concesión a la The Antofagasta-Bolivia Railway Company Limited relacionada con el uso de las aguas del Río Silala en territorio chileno, por tiempo indefinido y con el fin de aumentar el caudal de agua que surtía al puerto de Antofagasta, [Ferrocarril de Antofagasta a Bolivia] en tanto que el 21 de junio de 1908, esta misma empresa británica The Antofagasta-Bolivia Railway Company Limited solicitó a la prefectura del departamento de Potosí, la concesión del uso de las aguas del Silala para el abastecer con agua a las máquinas del tramo del tren entre el puerto de Antofagasta y la ciudad boliviana de Oruro, debido a que su funcionamiento era totalmente a vapor. La concesión fue entregada ese año a la compañía por las autoridades de Potosí el día 23 de septiembre del mismo año, siendo el primer uso registrado de sus aguas en territorio boliviano.
La compañía ferroviaria utilizó dicho recurso hasta 1961, cuando la compañía renovó su flota a petróleo diésel. Sin embargo, las aguas habrían continuado siendo utilizadas por diversas empresas del norte de Chile, principalmente la Corporación Nacional del Cobre de Chile, y a algunas empresas sanitarias de Antofagasta que la utilizan comercialmente hasta el día de hoy. De acuerdo al gobierno boliviano, estos usos habrían sido realizados sin ningún tipo de autorización, debido a que la concesión había terminado.
LAS PRIMERAS CONTROVERSIAS.
El 5 de mayo de 1996, diarios bolivianos acusaron la utilización de aguas bolivianas al denunciar que el Silala fue desviado artificialmente por empresarios chilenos, y que cualquier uso por parte de Chile debiera tener una compensación económica para el pueblo boliviano.
En junio de 1997, el gobierno boliviano de Gonzalo Sánchez de Losada, revoca la concesión por considerar que el agua no era para los fines que fueron otorgadas.
El 4 de abril de 2009, los gobiernos de Evo Morales y Michelle Bachelet anunciaron que habían llegado a un preacuerdo respecto al uso de las aguas del Silala. En el acuerdo, Chile se comprometió a pagar por el uso del 50 % de las aguas del río de forma retroactiva, mientras se realice un estudio hidrológico que defina la naturaleza de las aguas.
No obstante, debido a la oposición de algunos sectores en Bolivia a la ejecución de dicho acuerdo, este nunca fue ratificado y finalmente fue descartado totalmente cuando el gobierno de Chile decidió interrumpir las negociaciones de la agenda de 13 puntos en noviembre de 2010, cuyo punto 11 se refería precisamente a las aguas del Silala y los recursos hídricos compartidos.
Posteriormente, en abril de 2013, el gobierno boliviano inauguró un criadero de truchas que se alimenta con las aguas del río Silala,10 ante lo cual Chile, argumentando que el Silala es un río de carácter internacional, presentó una protesta.
Fuente: Wikipedia. Prensa nacional de Chile y Bolivia.