Honra y respeto a la vida humana | Importante hallazgo arqueológico en Tierra del Fuego

Honra y respeto a la vida humana | Importante hallazgo arqueológico en Tierra del Fuego

En Bahía Inútil de Tierra del Fuego, arqueólogos de la Universidad de Magallanes liderados por el arqueólogo Alfredo Prieto y con participación del Instituto de Biología Evolutiva, , descubrieron (2011) un entierro infantil bien conservado perteneciente a la cultura Selk’nam con características únicas. El ajuar que lo acompaña presentó artículos funerarios inusuales, no descritos en la literatura arqueológica de esa región. Se sabe muy poco sobre las prácticas mortuorias de los Selknam.

Los análisis presentados incluyen información sobre el sexo, la dieta y la genética del niño de corta edad – 4 a 5 años – que tenía una dieta predominantemente terrestre y sin problemas óseos o patologías.

La datación por radiocarbono sitúa el entierro al comienzo del período postcolombino.

Es un hallazgo único porque posee una riqueza de materiales arqueológicos misteriosos que eran desconocidos en la región. Algunas de ellas simulan herramientas conocidas, como pinzas para el fuego. Otras, como unas bolas con surcos o herramientas de piedra que sí sabemos para qué se utilizaban.

Los restos del niño estaban acompañados por diseños únicos de artefactos óseos. En su mayoría eran fragmentos de picos de pingüino rey y las mandíbulas de guanaco organizadas en pares para que parezcan picos con evidencias de amarre, algo inusual. En la literatura arqueológica no se encuentra nada parecido en ninguna parte del mundo.

Este hallazgo proporciona la primera evidencia genética del subhaplogrupo mitocondrial D1g5 en la población de Selk’nam en Tierra de Fuego, confirmando que sus orígenes están en la primera ola de colonización humana de América del Sur. Se le ha calculado una antigüedad de unos 15.000 años, es decir, su genética pertenece a los primeros colonizadores de América y su subsiguiente dispersión por el cono sur de América.

El entierro proporciona evidencia de interacciones de largo alcance con sus vecinos inmediatos; dos marítimos (Yamana y Kawesar) y dos terrestres (Haush en la isla y Aonikenk en el continente). Los Selk’nam no eran navegantes, por lo que todos los artículos de este tipo que se encontraron en el enterramiento provendrían de fuera de Tierra del Fuego, obtenidos de sus vecinos cercanos, como por ejemplo, el ñandú de Darwin (Rhea pennata) que se extinguió a finales del Pleistoceno y debió ser traído de la estepa continental, o la obsidiana verde, o los restos de molusco D. magellanicum que habita las profundidades marinas de Magallanes y probablemente fue recogido del mar por botes. Los Selk´nam no usaban botes.

El arqueólogo Alfredo Prieto lideró el equipo de investigación, integrado por Pedro Cardenas, Susana Morano y fotografías dee Thierry Dupradou. y el estudio fue publicado en «The Journal of Island and Coastal Archaeology».