A eso ya se refirió el Subsecretario | Víctor Maldonado | Opinión

- El Ministerio del Interior es el coordinador político del gabinete y, al mismo tiempo, un ministerio sectorial, lo que lo convierte en uno de los más complejos.
- Nunca es fácil evaluar una cartera bifrontal porque las perspectivas pueden ser múltiples. Es tan difícil su tarea que hay ocasiones en que puede tener más éxito en coordinar a los demás en el gobierno que coordinarse dentro.
- Interior es tal vez el ministerio más expuesto a la contingencia, con situaciones que irrumpen en la agenda con la rápida prioridad que alcanza una emergencia en un breve tiempo. Lo más parecido a un cuartel de Bomberos.
- Las dificultades se potencian cuando son varias las autoridades que encuentran motivos para dar su opinión sobre una “noticia en desarrollo”. Si la situación es cambiante y se van sumando a cada rato nuevos elementos, la posibilidad de entrar en contradicciones es altísima.
- La manera que se conoce de enfrentar estas contingencias es disciplinarse tras una precisa definición de roles, de manera que esté claro quién lleva el comando de cada acción y tiene la última palabra. No es un asunto de jerarquías, se precisa una asignación de responsabilidades que no admita dudas.
- Se nota que el gobierno se metió en un lío cuando son varios los que se consideran llamados a dar explicaciones de un tema complicado, cuando todos menos uno tendría que quedar en un segundo plano, no porque no pudieran decir más, sino porque no debían hacerlo.
- Las palabras mágicas que han estado ausentes son las que entregan pases y que recuperan la sana práctica del trabajo en equipo. El orden recobrado empieza cuando todos comienzan a decir: “a eso ya se refirió el subsecretario”.
- La ministra del Interior, por ejemplo, no necesita demostrar que habla bien porque siempre lo hace; lo que tiene que mostrar es que puede decidir no hablar cuando otros en el gobierno ya se están haciendo cargo de un asunto que requiere el manejo fino de los detalles. También hablando con brillo se pueden cometer errores. Decidir no decir cosas inteligentes innecesarias es una virtud. También los silencios pueden ser inteligentes.
- No puede extrañar que el trabajo de sostener la estantería se esté haciendo cuesta arriba. Se nota porque Interior está a cargo de temas prioritarios para la ciudadanía y, en el momento que más conciencia se tiene de la envergadura y complejidad de enfrentar la criminalidad y la inmigración ilegal, este ministerio aparece arrinconado en incidentes importantes, pero magnificados.
- La defensa gubernamental ha sido mala porque está siendo desordenada, lo que se puede entender, dada la presión constante que se soporta, pero a lo que hay que poner un rápido final. Apenas se recomponga la dirección política de La Moneda se podrá tomar la ofensiva.
- Está pasando desapercibido uno de los mayores déficit políticos de esta etapa: la mediocre conducción en la que se ha dejado caer la derecha en esta coyuntura. Su vocería de trinchera está siendo particularmente miope. Los que se están dedicando a preparar el futuro tendrán que regresar porque los que dejaron a cargo están causando demasiados estropicios.
Víctor Maldonado